SEGUNDA EDICION (Agotado)

viernes, 23 de marzo de 2012

ROBOS EN LA CALLE NUEVA

   La calle nueva no conocía el asfalto, hoy en conocimiento sobre el pavimento, circula el tráfico peatonal y rodado;  se oye el ladrido del perro. Hace tiempo dejó de jugar entre los chavales casi ya adolescentes como si estuviera en desacuerdo con el panorama  de la actualidad. El chucho con  amor propio hace lo que puede mientras la oleada de asaltos a los domicilios se suceden una y otra vez hasta llegar a ser una tras otra las viviendas robadas y asaltos que se están produciendo.
A jubilados, trabajadores, a mujeres... con intimidación cuando los cacos se encontraron a niños dentro. Siendo las casas de los que nos ausentamos las más perjudicadas cuando en algunas entraron ya repetidas veces.  Es la comidilla en la tienda , en el bar  y el de los vecinos que se sienten impotentes ante lo nunca visto. Cierto es que la ley dice que el domicilio es legalmente lugar impenetrable, pero el robo consiste precisamente en violar lo inviolable amén del destrozo que se hace birlando el  dinero, bienes materiales y objetos sentimentales.  Se escucharon rumores sobre una manifestación por el choriceo generalizad. Esta intimidación a que estamos sometidos tantos vecinos de toda una manzana es el comentario de todo los gustos;  pero los hechos son aunque sabíamos  que estamos en crisis. Peligran los ahorros en los bancos, cáritas está batiendo el record en peticiones de alimentos pero no sabíamos que entrarían en las casas de ricos y pobres hasta vaciar los aposentos.