Reunidos alrededor del convite llegaron los invitados con el aperitivo dispuesto, entre preparativos la cubertería, copas de cristal en una serie de mesas dispuestas entremezcladas entre plantas ornamentales. Un ambiente acogedor, extraordinaria decoración. Camareros y camareras, de aquí para allá, servían los entremeses sobre bandejas.
Los comensales conversaban, los hombres bien vestidos y mujeres arregladas en aquella noche rebosante de elegancia, el murmullo del ambiente en la celebración de los hijos hacia un padre en su honomástica.
Recién terminaban el postre emprendieron el cante con aires de regocijo. En la cortesía del local, nada sabían, excepto que era el día de buen cumpleaños del hombre cercano a los 80.
Del himno cantado entonaron la primera nota. !Felices de esas!
Aquello fue mágico.
Desde el fondo de la sala la máquina de humo irrumpiendo con su fhsssss y siseo, una cascada de luces dibujaba un escenario radiante destellando halos plateados, dos cabezas móviles bailaban a son del himno del cumpleaños feliz que se cantaba. Colores anaranjados, rojos intensos entre flash brillantes en destellos fucsia. Instalé sofisticado montaje una serie de Focos led conectados entre sí en lenguaje de la iluminación que seguían la partitura de la música, un fondo y cortina de telón, la noche, con 64 puntos estrellado imitación firmamento comprado en dólares por ser tecnología made in U.S.A.
El montaje sobre acero inoxidable se erguía sobre dos pies formando columnas graduables mediante pernos de seguridad hasta alcanzar los cuatro metros de altura. Los instrumentos en la base de aquel escenario a toda música con aires de fiesta.
De repente el equipo de sonido rompió el silencio con un sonido genuino, graves secos y potentes del Subwofer Music Son fabricación en Valencia. Dos medios y agudos de concierto de sumaban a la frecuencia, encadenados en la altura colgaban del puente en cada banda, sistema de satélite de éxito reconocido por auténticos técnicos de sonido contrastado empleado en los conciertos.
Al mismo tiempo, aquellas bengalas fluorescentes, el reflejo del humo formaba un arcoiris colosal que inundaba el acontecimiento apareciendo de repente el explendor del escenario en la sala.
Ocurrió en febrero de este mismo año para un cumpleaños inolvidable.
J1 Iluminación, sonido y fiesta.
