SEGUNDA EDICION (Agotado)

jueves, 9 de marzo de 2017

EL NIVEL DE LA FIESTA

La fiesta concertada bajo la celebración del patrón, carnaval o cualquier otra  causa u motivo que se precie. Y la juventud 'divino tesoro' quien toma protagonismo automáticamente. Eligen artistas según sus modas y grupos preferidos, la juventud está en todo, es energía, es vitalidad, es vida.
Con su presencia la fiesta está servida, ellos eligen sitio, lugar y costumbres, bien o mal, aunque eso es harina de otro costal. La juventud la hemos tenido todos y las instituciones los presupuestos y tenencias, disponen y proponen en altura de miras para la calidad de la fiesta.
La fiesta en la madurez se hace más selecta, concertada o familiar, evento social, bien sea por boda, comunión o bautizo, con actuciones acordes y surgen bailes, animación o flamenco.

La fiesta, la gran olvidada para la tercera edad, tan presente en la sociedad.
La fiesta es donde juega un papel importante la música, a su vez, clasifica a los festejantes y se optan en preferencias los gustos musicales.
Paradógicamente la fiesta cuando más necesaria para la actividad del ocio y el entretenimiento en esta etapa del ser humano. En la comunidad de la senectud, suena a exclusión, sin voz ni voto.
Inexplicablemente en las actividades del  entretenimiento impera el olvido de abismo de una comunidad importante y numerosa.
En países Orientales y culturas de arraigo se venera la edad, la sociedad ofrece haberes y privilegios.
En inglaterra el abuelo es "El great father"  "El gran padre". Idem para femenino. Por contra en América en la cultura de los americanos, se considera como status indeseable.
Hay lugares en la sociedad moderna con sensibilidad legítima y política, traducido en aquellos sitios que organizan sus actividad y entretenimiento. El recurso del bailes con sus pasodobles, con la música de siempre que se presenta como gran benefactora para la salud, acompañada de orquestas, solista o duos bajo presupuestos y proporcionan la opción de ocio y entretenimiento, terapia en el alhzéhimer ideal al estado psicológico.
Se activan los actos en centros sociales, peñas, residencias. Agrupación de cualquier índole sin esa imposición cansina y trasnochada de alvedisco. 
A media España pongo por testigo que la tercera edad, personas encantadoras  baila lo que le hechen pasodoble twist o un buen tango a buen gusto en plazoletas y alamedas, en salones de actos.
                                             
                                                 B.J.Benítez

                 De la Wikipedia

En la actualidad, los esfuerzos por combatir la discriminación por edad conocida como “viejismo” (el prejuicio o discriminación por edad) rinden frutos gracias a la creciente notoriedad de adultos mayores sanos y activos. En la televisión es cada vez más inusual que se presenten a los ancianos como personas decrépitas e indefensas, y en cambio, con más frecuencia se les describe como personas sensatas, respetadas y sabias. [Es muy común asociar a la tercera edad con la pasividad, ya que los cambios biopsicosociales que la acompañan provocan un cambio en su rutina, además existe una enorme estigmatización de asociar la tercera edad con la decadencia de la vida del ser humano. Una forma de socavar esta situación es la realización de actividades recreativas, las cuales son entendidas como “el conjunto de actividades a las que el individuo puede dedicarse de lleno, ya sea para descansar, para divertirse, para desarrollar su información y formación desinteresada, su participación social voluntaria o su libre capacidad creadora”, ya que a través de estas actividades se logra romper con la rutina, con el sedentarismo y con el aislamiento del que pueden ser parte.]

Un envejecimiento activo es cada vez más importante, pues el paso de los años es un proceso, no un suceso, por tal situación es apropiado pensar en el envejecimiento lo más saludablemente posible y no sólo se habla del sentido físico sino también psicológico, afectivo y social. Al pensar en una forma saludable de envejecer se encuentra como alternativa y herramienta la creatividad para un envejecimiento activo, ya que en el V Congreso Internacional de Creatividad e Innovación, se habló de la creatividad como sinónimo de aprendizaje; esta relación se dio, pues al estimular la creatividad en las personas de la tercera edad se concreta un proceso educativo que propicia el desarrollo de su funcionamiento mental.

De esta manera, en la actualidad se emplea el concepto de envejecimiento satisfactorio para referirse al mantenimiento de la calidad de vida durante la tercera edad. Este concepto se refiere a un normal declive de las capacidades, mas no al envejecimiento caracterizado por la patología y la dependencia, en el cual se produce un deterioro grave en el funcionamiento del individuo producto de la tercera edad. De esta manera, esta etapa es vista como una fase, en la que si bien se presenta una mayor disposición a las enfermedades, los adultos mayores no padecen enfermedades graves. Con ello, se reconocen sus potencialidades para que a pesar de los cambios propios de su edad, puedan gozar de salud física, logren ser autónomas, encargándose de su autocuidado y que también puedan conservar una postura activa frente a la vida. Con ello, los adultos pueden involucrarse en dos tipos de actividades muy importantes para su bienestar, la actividad social y la actividad productiva. La primera es entendida como el mantenimiento de relaciones interpersonales y la segunda hace referencia a aquellas actividades, en las que los adultos mayores perciben que pueden contribuir a la sociedad, amigos, familiares o a ellos mismos. Por otro lado, tanto los factores objetivos (condiciones de vida) como subjetivos (experiencias subjetivas) en la vida del adulto mayor influyen y se interrelacionan para que en la tercera edad, uno se pueda sentirse satisfecho con la vida. Por lo tanto, ciertos indicadores externos como la situación económica, el contexto familiar, la salud física y factores internos como la capacidad de adaptación y ajuste emocional a situaciones adversas se complementan y relacionan con el fin de que los adultos mayores pueden tener recursos internos como recursos externos adecuados que contribuirán con su bienestar subjetivo. Cabe destacar que muy pocas veces los individuos van a tener adecuados recursos externos, sin embargo es necesario que se logren aceptar ciertas limitaciones, situaciones difíciles, en las que la capacidad de adaptación resultará fundamental para ajustarse al entorno.